23 feb 2010

El escocés Andy Murray y el ruso Igor Kunitsyn jugaban el segundo game del partido de la primera ronda del torneo de Dubai y cuando parecía que uno de los dos sacaría ventaja, todo volvía a quedar igualado. Después de ¡25 minutos! el tres del mundo se quedaba con el juego y por los altoparlantes se escuchaba la palabra oficial de la ATP: "Fue el más largo de la historia". Al fin y al cabo, terminó siendo el segundo. Es que el game más largo en singles de varones lo habían protagonizado el 26 de mayo de 1975 en Surrey, Inglaterra, Anthony Fawcett, de Rhodesia, y el inglés Keith Glass, con una duración de 31 minutos y 37 deuces, en los cuales se jugaron 80 puntos, nada menos. Cuando la agencia DPA le consultó la estadística a la ATP, contestaron que no hay un registro seguro para saber qué game fue el más extenso de la historia, aunque éste fue "definitivamente uno de los más largos", dijeron. Ayer ese game había comenzado a las 21.16 y finalizó a las 21.41. El partido tuvo una duración de 1 hora y 41 minutos es decir que ese larguísimo game ocupó un cuarto del partido. "El segundo game fue increíblemente largo", dijo Murray más tarde. El escocés arrastra una molestia en el tobillo y resumió: "Probablemente fue el partido perfecto para mí, con muchas carreras, puntos largos y también largos games". Entre las mujeres el game más largo lo desarrollaron Noelle Van Lottun y Sandra Begijn durante 52 minutos en una de las semifinales del Campeonatos Indoor de Alemania, en Ede, el 12 de febrero de 1984. En ese año, pero en octubre, también se produjo otro momento inolvidable entre las mujeres: se jugó el partido más largo de la era moderna con 6 horas y 31 minutos entre Vicki Nelson Dumbar y Jean Hepner, en Richmond. La primera ganó 6-4 y 7-6 (13-11) con un tie break que duró 1 hora y 47 minutos y uno de esos puntos se disputó durante 29 minutos y la pelota pasó la red 643 veces.
FUENTE CLARIN DIGITAL